Les he comentado antes que la industria del entretenimiento (que abarca mucho más que el sector musical) es de las que ha sufrido el mayor impacto negativo, provocado por la pandemia. Claro, artistas de fama internacional o mundial que, entre otras cosas, cuentan con un amplio capital y empresas que les respaldan no les ha ido del todo mal; enhorabuena por eso. De seguro ha sido diferente la forma de ejecución, pero han podido producir. Sin embargo, para otras figuras del canto y la música (sin ese mismo factor económico y de reconocimiento) la historia ha sido diferente. Para mí, la música como herramienta de impacto social en tiempo de crisis, ha triunfado. Pero como industria no lo percibo así; al menos, no en todos los países.

La comunidad artística y musical (de diversos géneros) han obsequiado a la gente su arte para que la pasen un poco mejor, dentro de la situación. Han hecho que las personas sonrían, bailen, canten y no pierdan la esperanza de un mañana mejor. Pero muchos de esos mismos artistas la están pasando mal. En mi isla, sé de varios que ya no tienen cómo enfrentar las facturas mensuales porque su único ingreso era el que recibían a raíz de sus presentaciones. Algunas de estas personas, cantan a través de las redes sociales y colocan su número de contacto para que les cooperen por ATH Móvil. Mientras que otros(as) han cambiado (temporeramente) de profesión y así, cada cual ha ido resolviendo como puede.

No es menos cierto, que agrupaciones como el Trío Voces y Rafaelito Muñoz y su Trío, han lanzado nuevas producciones discográficas; lo cual es una buena noticia. De hecho, Monín Fraticelli también está grabando un disco muy hermoso a juzgar por algunos temas que me ha compartido. Asimismo, otras agrupaciones han conseguido realizar presentaciones en las redes sociales con el auspicio de firmas comerciales. Eso me alegra y ojalá se unieran otras para apoyar a la mayor cantidad de artistas posible. Especialmente, a aquellos que están sufriendo por la falta de taller. Hay tríos que han podido trabajar mediante el concepto de serenatas; que permite un mejor control y el distanciamiento social. Inclusive, hasta han realizado serenetas virtuales. Debo decir que, en Puerto Rico, exponentes de distintos géneros se han visto muy afectados, pero destaco los tríos porque es el tema que atañe a este blog.  

Pero vamos a algo más positivo, porque toda crisis es también una oportunidad. Y miren que se los dice alguien que se ha arriesgado a publicar un libro en medio de esta difícil situación. Yo sé que cuando no entra dinero al bolsillo o la cuenta de banco, no es fácil entender lo que pueda sugerir porque no resuelve el problema inmediato: la falta de efectivo. Pero creo que hay que aprovechar este tiempo para poner en acción la creatividad. Por ejemplo, muchos(as) cantantes y músicos tienen talento para componer, pues este es el mejor momento para hacerlo. Siempre he dicho que hace falta refrescar el repertorio con melodías inéditas que capturen a diferentes generaciones.

Esbocen nuevos planes y proyectos para sus vidas y agrupaciones. Que esta experiencia sirva de enseñanza para unirse como camaradas de un mismo ambiente y delinear los pasos que se deben seguir de cara al futuro y que, ante otra crisis, se puedan ayudar unos a otros. Si algo esta pandemia debe provocar es que reflexionemos sobre a dónde nos estamos dirigiendo como humanidad. Debemos ser más solidarios y aprender a trabajar en equipo. Por ejemplo, una vez pase todo esto, se podría crear un fondo de ayuda para emergencia que se nutra de (al menos) dos actividades anuales de recaudación. Se puede ofrecer una serie de conciertos con la participación de muchos tríos. Que cada agrupación (miembro) esté dispuesta a donar, una vez al año, su talento para allegar dinero a dicho fondo. Como esta, hay otras tantas estrategias que se pueden delinear y ejecutar en favor de todos los artistas.

De otra parte, quienes dominen la tecnología o conozcan de alguien que les pueda ayudar; actualicen sus artes y publicaciones en las redes sociales; tómense fotos nuevas de cara al 2021, hablen a través de Instagram o FB LIVE con su público. Canten canciones, cuenten anécdotas de sus trayectorias profesionales, ofrezcan tutoriales o compartan lo que entiendan. Por mencionar un ejemplo, Bebo Cárdenas realizó un tutorial de maracas buenísimo. El objetivo es que se mantengan activos y con presencia pública. Abran un canal de YouTube y suban material inédito que les pueda generar ingresos.

Aprovechen estas fechas festivas y llamen a las emisoras de radio y televisión para que les permitan presentarse para cantar canciones navideñas noticieros o programas. Lo importante es no dejarse caer o perder el ánimo porque es mucho lo que se debe enfrentar y hay que estar fuertes espiritual y emocionalmente. En verdad le pido a Dios en mis oraciones que todo mejore y confieso que me causa mucha tristeza e impotencia no poder hacer más. Sé que no es fácil, yo misma he tratado de conseguir a alguna firma comercial que patrocine este medio para poder producir más, y no he tenido éxito. Pero rendirse, nunca será la verdadera opción.