En mayo se conmemora el Mes Nacional de la Radio en Puerto Rico y, enmarcado en dicho contexto, quiero destacar (a grandes rasgos) la importancia de este medio de comunicación masiva en el auge de la música de tríos y el género del bolero en la isla.
En el 1920 se inauguró la primera estación de radio en el mundo, la KDKA, y dos años después la primera emisora radial en Puerto Rico, WKAQ. De hecho WKAQ, en San Juan, es la primera estación de radio de Puerto Rico, la segunda de Hispanoamérica y la quinta en el mundo. Esta invención cautivó con su llegada a una curiosa audiencia, aún cuando no todos tenían tan preciado artefacto en sus hogares.
Por ejemplo, se estima que para 1930 había 4,000 aparatos de radio y una audiencia de 25,000 personas, y muchas familias hacían lo posible por contar en sus casas con el afamado equipo que les ofrecía información y entretenimiento. En tiempos de cambios y dificultades de diversas índoles (políticas, económicas, bélicas, y sociales) que enfrentó la isla en las décadas del 20 al 50, la radio se convirtió en un aliciente, especialmente con la música y los programas de comedia.
Por su parte, la llegada de la televisión en marzo de 1954 supuso, en ese momento, que atentaría contra la permanencia de la radio, pero no fue así. Primordialmente, porque la radio puede llegar más rápido a más personas y lugares por ser menos costosa. Esta es una ventaja que posee la radio en comparación (todavía hoy) con la televisión. La radio, en mi opinión, significó para el hombre y mujer puertorriqueño(a) de los años 20 al 50; mucho más que un simple invento, fue un valor añadido a sus vidas. Esto me lleva a la música de tríos y al género del bolero.
Fueron muchos los tríos y cantantes de bolero que debutaron en la radio y se dieron a conocer, aumentaron popularidad y se profesionalizaron gracias a este medio. El legendario Programa de los aficionados de don Rafael Quiñones Vidal en la WNEL, presentó a muchos artistas que luego alcanzaron la fama como el inolvidable Bobby Capó y Felipe Rodríguez. Claro está, la mayoría de estos mismos artistas también debutaron en su programa de televisión La tribuna del arte que se transmitió desde el 1954 por WKAQ Telemundo por más de dos décadas. Esto abonaba a sus respectivas carreras profesionales para lograr éxito y fama.
Yo diría que Quiñones Vidal, además del aporte y logros obtenidos en su trayectoria radial y posteriormente televisiva, dejó un legado invaluable para la promoción del género del bolero y la música de tríos. La cantante María Esther Pérez Félix participó en este programa, aunque también se había presentado en la emisora de Fajardo WMDD. Precisamente el Dúo Pérez Rodríguez (María y Felipe) se presentaba los martes y jueves por la radioemisora WIAC con gran acogida entre la audiencia.
De otra parte, la programación de la West Indies Advertising Co,. (primera agencia de publicidad puertorriqueña) por WKAQ sirvió de plataforma para muchos músicos y artistas de diversos géneros; entre los cuales se destaca el Cuarteto Mayarí de Plácido Acevedo. De hecho, las composiciones de Acevedo tomaron notoriedad gracias a la radio y a que se presentaba en dos emisoras de la capital. Lo mismo ocurría con las canciones de Felipe Goyco «don Felo» y Rafael Hernández que, en la programación antes mencionada, vieron estrenar hermosas melodías como por ejemplo el bolero «Gitana» del Cumbanchero.
Gracias a la radio, músicos y cantantes (hombres y mujeres) salieron del anonimato y la gente no solo les conoció, sino que les hizo parte de su diario vivir. Por eso, las velloneras eran el alma del barrio donde se inmortalizaban los artistas a través de sus canciones. Eran tiempos difíciles y la música fue un alivio y entretenimiento que llenaba los corazones. Bueno, todavía lo sigue siendo y no hay que ir tan lejos en el tiempo para comprobarlo. Ante la pandemia que estamos viviendo hoy día, la música ha sido un gran mecanismo para dar un espacio de despeje mental a través de la infinidad de artistas que han ofrecido conciertos por las redes sociales.
Regresando al tema, un aspecto importante a resaltar, es que no solo se trataba de participaciones incidentales, sino que varios de los cuartetos, sextetos y tríos eran parte permanente de la programación como fue el caso del Trío de Johnny Rodríguez. Asimismo, el Trío Vegabajeño que se mantuvo en WKAQ un largo periodo de tiempo. Esta agrupación, nuestro trío nacional, participaba en programas a través de distintas emisoras de la capital y, al igual que Johnny Rodríguez, era muy querido por la audiencia. Claro está, el Trío de Johnny Rodríguez tuvo participación fija en la cadena radial Columbia Broadcasting System en Estados Unidos, y de hecho fue el primer trio boricua en hacerlo.
Mucho le debe este género y concepto musical a Gilbert Mamery porque para estos años promovía en WPRA en Mayagüez infinidad de artistas como Sylvia Rexach, Felipe Rodríguez, Bobby Capó, Los Hispanos, La Sonora Matancera entre muchos otros. Luego, a través de la televisón, Mamery también continuó su aportación a la industria musical.
A principios de la década del 50, WKAQ tuvo un programa que se llamaba La hora del bolero y se transmitía los sábados. La radio fue un vehículo demasiado valioso para los cantantes y los tríos, toda vez que además de poder presentarse realizaban inclusive grabaciones. Por ejemplo, el autor Pablo Marcial Ortiz, en su libro A tres voces y tres guitarras, nos cuenta que las primeras grabaciones del Trío Los Romanceros se hicieron en WAPA Radio para el sello VERNE, donde se grabaron éxitos como: Aires de Navidad, Siete besos, Bomboncito y Por qué será. También se desprende de dicha joya literaria que hasta el nombre del Trío Los Murcianos, de Máximo Torres, provino de un concurso que se realizó en la emisora WVJP. De otro lado, en el Libro La Vellonera está directa, de Pedro Malavet Vega, se destaca que el Trío Los Tres Romanceros (arriba mencionado y compuesto por Felipe Rodríguez, Julito Rodríguez y Sotero Collazo) también grabaron discos en WKAQ y WNEL.
Como podrán ver la radio fue un medio de comunicación vital para que, principalmente, en las décadas del 40 al 60, el bolero y los tríos fueran el género y concepto musical más prolífero. Posteriormente surgieron múltiples programas dedicados a la música de tríos y el género del bolero a lo largo y ancho de la isla de Puerto Rico. No podemos olvidar que siendo el país con más emisoras de radio por milla cuadrada para los artistas (de todos los géneros) era vital que les pautaran su música.
Otro destacado compositor, Pepito Maduro, transmitía en WKVM, que fue la primera estación radial de Arecibo, con su Trío Los Tres Caballeros. Se podrían resaltar más artistas que tuvieron exposición a través de la radio como Myrta Silva, José Luis Moneró o el Trío de Piquito Marcano que participaba en los años 30 en la WNEL. No obstante, lo que quiero destacar es que la radio puertorriqueña nos permitió conocer a muchos de nuestros compositores, músicos y cantantes lo que a su vez, ayudó a la gran acogida del bolero y la música de trío. No hay duda de que la radio fue fundamental en nuestro desarrollo cultural como pueblo, entre otras cosas, exponiéndonos a la música.
El propio Felipe Rodríguez, que fue un amante de la radio, tuvo un programa llamado Este es su disco a través de la emisora WITA desde San Juan. Al presente, tristemente, no hay mucha programación dedicada exclusivamente a esta música de los tríos y los boleros, pero quedan algunos y aprovecharé para compartirles el enlace que tengo en este blog sobre emisoras que aún pautan esta hermosa música. Como cuestión de hecho, el director y fundador del Trío Los Andinos, Ramoncito Rodríguez, el cantante de salsa, bolero y música de trío, Harry Fraticelli y el director y primera voz del Trío Los Inolvidables, Luis Rodríguez, además de ser artistas mantienen sus respectivos espacios radiales en los que exponen esta música.
Me siento más que agradecida de Dios y la gerencia de WIBS 1540 AM de Guayama, por la maravillosa oportunidad que tuve de laborar en diferentes facetas desde los 19 años de edad. Pero como les he dicho antes, la etapa que más amé fue cuando moderaba el programa Domingo de recuerdos.
El tiempo ha pasado y sabemos que la forma de hacer las cosas ha cambiado, pero el amor por este concepto y género musical sigue presente aún con la cantidad de retos que le ha tocado enfrentar a la industrial musical. La exposición en este medio ya no es igual por múltiples razones, pero debemos escuchar los programas que todavía quedan y patrocinar las firmas comerciales que les auspician. En lo personal, es la radio mi medio de comunicación preferido y le envío mis respetos y felicitaciones a todos los que trabajan en las emisoras de mi bello Puerto Rico.
Enlace emisoras con programas música de tríos y boleros en PR.